CARLOS SIERRA: THE GREEN SYMPHONY (La Sinfonía Verde)

CARLOS SIERRA:

THE GREEN SYMPHONY

(La Sinfonía Verde)

Texto: Marce López Real

Fotografía: Celia Macías

  

             Son las seis de la tarde y acudo a la cita. De negro riguroso, me recibe en su estudio, y casi sin darme cuenta, me dispongo a acompañarlo en un excitante viaje hacia la sala de conciertos, la fábrica de sueños, el país del desorden ordenado, el laboratorio del alquimista, la garita del centinela de las musas, el hogar del hombre tranquilo: la casa del artista, el espacio de Carlos Sierra.

            Extiende sobre una mesa camilla un mantel de terciopelo adquirido a principios de los años 70 en Waterloo Plain, Ámsterdam, sobre el que dispone un pequeño cuenco de cerámica, una copa de cristal lisboeta y una botella de vino. Sin prisa y sin pausa comienza el relato.         

      1.– OBERTURA: Biografía.

      “Ser pintor y sólo pintor”

     

      Carlos Sierra (Lieres – Siero, 1943) tiene en la memoria aquellos dibujos que, siendo niño, hacía en los azulejos de la cocina de su casa, donde su madre, lejos de borrarlos, esperaba a que el paso del tiempo apagara los trazos. Le fascinaba meterse en una iglesia en ruinas cercana a su casa, donde los gitanos que la habitaban dibujaban en las paredes con el carbón de sus hogueras; desde ese momento, comienza su fascinación por este material.

      Carlos Sierra se pasaba las horas pintando, y llamó la atención del artista Casimiro Baragaña, quien le presenta a Pérez de las Clotas, director de La Nueva España, diario en el que hace sus primeras colaboraciones como ilustrador.

      Por entonces, con sólo 16 años, comienza a trabajar en la agencia de publicidad de Manolo Brun, en Oviedo. Estamos en el año 1960 y forja amistad con un grupo de artistas, entre los que se encuentran Fernando Alba, José Manuel Legazpi, José Luis Fernández y Sancho Miñano, junto a los que intenta sobrevivir al ambiente cultural de la época.

      En 1962, abandona su trabajo en la agencia de publicidad y viaja haciendo auto-stop a París (diciéndole a su madre que París estaba en Asturias). En una de sus visitas a Oviedo, obtiene un primer premio en dibujo, un segundo premio en pintura y un tercer premio en escultura en los Concursos de Arte Juvenil celebrados en el Palacio de Toreno.

      En París se empapó de todas las corrientes y vanguardias de la época, vivió con los impresionistas, se unió a la bohemia y vivó Montmartre.

      Como cantaba Carlos Gardel “Montmartre es luz, es cóctel, torre de Babel…”.

     

     

      En 1965, expone sus obras, por primera vez, en la Galería Cristamol de Oviedo junto a Sancho Miñano y José Luis Fernández. Un año más tarde, presenta su primera exposición individual en el Ateneo de Oviedo.

      Llegan los años 70 y tras contraer matrimonio se instala en Ibiza. “Fueron momentos de cambios que afectaron a la pintura. Allí empecé la introspección, el mundo de la contemplación y comencé la etapa realista. Comencé a prestar atención a lo que estaba pasando a mi alrededor, partiendo de cero”.

      Se establece definitivamente en Oviedo en el año 1975.

Óleo sobre lienzo. 1975

2.- SCHERZO: El artista y el sentido de su obra.

      Influido por la obra de Toulouse-Lautrec, acercándose a Picasso, Giacometti y Cézanne, tras un devaneo de conciencia y percepciones y habiendo vivido todas las vanguardias parisinas, su obra se detiene a retratar las cosas que le rodean: la naturaleza sencilla.

      Tras una ruptura psicológica coincidente con el movimiento hippie, Carlos Sierra vuelve a retomar “las cosas”, y a partir de ahí, toca el taoísmo y todo lo relacionado con la filosofía Zen, el Budismo y el Yoga: “las cosas de mi vida”. Todo ello se refleja no sólo en su personalidad, si no también en su obra.

"Busco la sencillez, lo auténtico, la inmediatez, la reivindicación de mi autonomía vital. Sin prejuicios"

      Carlos Sierra empezó a pintar lentamente, concentrado en cada trazo y poco a poco la inspiración hizo que fluyera ese estado depurado. “Los colores son como el silabario, van de la A a la Z, sólo hace falta unirlos y combinarlos para crear una obra”.

      “Recojo cosas que están en el cosmos y aparece la magia como algo insólito, como un sortilegio que me lleva al asombro y a la duda”. Con esta frase, Carlos narra cómo espera la sorpresa en toda su creación, escapando de lo estricto y teniendo una “manga ancha”, en la que todo cabe.

"Lo importante es estar atento.  Pensar: hoy no pinté, pero no se ha perdido nada"

     

      Se define como perteneciente a un “realismo aceptado”, empleando elementos que el común de los mortales ve y tiene a su alcance. Se trata de un “realismo mágico, trasnochado” en el que cabe la sugestión, el desconcierto, el asombro, las dudas, la provocación… el despertar de los sentidos.

      La “realidad iluminada” de cómo sentarte frente a una ventana y ver un cuadro diferente con el paso de las horas; la fugacidad está presente siempre en su obra.

     

Ventana del estudio de Carlos Sierra, con vistas a la Plaza de la Escandalera. Uno puede imaginar que a través de esos cristales haya llegado la magia.

The Green Symphony: La Sinfonía Verde

      Carlos Sierra crea la expresión “The Green Symphony” cuando descubre la necesidad de profundizar en una obra observando el paso del tiempo, “igual que los escritores que reelaboran sus textos una y otra vez”. Todo esto tiene que ver con los cambios que sufre lo perecedero; así, como una col no tiene los mismos colores recién cortada que transcurrido un tiempo. Carlos hace una reflexión: “todo fluye, evoluciona, cambia, y esto lo compruebo a la hora de pintar…”.

No sólo pintó las coles, The Green Symphony supuso un reencuentro con el verde. Para él es explorar un mundo, en la estructura y en el color. “La pintura se secó y ha mutado en el color y en la forma. Siempre tenemos la idea de una imagen; hoy es así, pero mañana ya no será así. De la misma manera que antes tenía el pelo negro y ahora lo tengo blanco”.

Coles, 2009
Óleo sobre tabla. 20x20 cm.

"Los verdes se van al carajo, aparecen los verdes vejiga, los verdes limón,  el cinabrio..."

Boceto de un fragmento de una col,  hecho a carboncillo para llevar a gran formato.

3.- ALLEGRO: Técnicas y producción.

Modelos

      Los motivos de su obra son diversos: arquitectura y atmósferas urbanas, fondos de ventanas, paisajes rurales, patrones geométricos…etc.

      La naturaleza, “lo que está ahí, las cosas  que todo el mundo ve”, es su principal fuente de inspiración: coles, cebollas, membrillos, plumas, pájaros, troncos de árboles, ramas… y todo lo relacionado con la esencia de la vida.

Cebollas, calabazas, ramas ...

La naturaleza muerta invade muchos de los rincones del estudio de Carlos Sierra.

Materiales

      Utiliza todo tipo de soportes, principalmente tela de lienzo y lino crudo por cómo recibe el color, cómo lo mantiene, ya que apenas se altera en el proceso de secado. También emplea papel y tablas, concretamente tablero fenólico, que ni se curva ni pudre, y en el que el arrastre y los empastes logran una calidad para invitar al espectador a “meter las narices en la obra”.

      Óleos, acrílicos, tinta, acuarelas, pastel, carbón (palo quemado), técnicas mixtas...  Emplea de todo, dependiendo del momento y del motivo.

      Hace bocetos, pruebas, pruebas para pruebas con los distintos colores y soportes, hace evolucionar a las figuras y las fragmenta, antes de llegar a la obra final.

        La sutileza de su pincelada, la densidad y los sencillos matices, remiten en la mayoría de sus trabajos a una opción personal y manera de entender la vida, sólo al alcance de un genio.

"El carbón es un palo quemado, el fuego en un palo. La sustancia primigenia, lo más puro, el trazo certero, la inmediatez... Por ahí van los tiros"

Pruebas de manchas y arrastres de tinta.

Paleta

                                                      .

      Para Carlos Sierra tampoco existen fronteras en cuanto al uso de instrumentos de trabajo: pinceles, espátulas, brochas, lápices, pies, manos, pelo… Todo vale. No hay ningún patrón a seguir.        

                                        

"Un solo pincel puede ofrecerme múltiples posibilidades para expresarme; tanto el pelo como la madera, me ayudan"

      Ha sido una tarde inolvidable. Una lección de humanidad, una clase magistral de uno de los grandes: CARLOS SIERRA, el ciudadano del mundo que inmortaliza la MAGIA.

                                                                                            OVIEDO,  Mayo de 2011.           

4. FÍNALE:   Bibliografía y Fuentes

BARÓN, Javier. Carlos Sierra: la realidad iluminada. Oviedo, CAMCO: 1997. 205 p. ISBN: 84-88951-34-5

Entrevistas realizadas por Marce López Real a CARLOS SIERRA durante los meses de abril y mayo de 2011.

Oviedo, desde el estudio del pintor, 1995
Óleo sobre lienzo
90x73 cm.

Exposiciones

EXPOSICIONES INDIVIDUALES

• 1966  Ateneo de Oviedo
• 1966  Ateneo Jovellanos, Gijón
• 1967  Galería Benedet, Oviedo
• 1968  Casa de Cultura de Avilés
• 1973  Galería Benedet, Oviedo
• 1976  Galería Tassili, Oviedo
• 1979  Galería Tassili, Oviedo
• 1987  Exposición Homenaje XVIII Certamen Nacional de Pintura de Luarca
• 1997  La realidad iluminada, Centro de Arte Moderno Ciudad de Oviedo
• 2015  Años 60. Pinturas y dibujos. Casa de Cultura de Pola de Siero

EXPOSICIONES COLECTIVAS

• Sala Cristamol, Oviedo
• Galería Tantra, Gijón
• Galería Áltex, Madrid
• Galería Kandinsky, Madrid
• Galería Vallribera, Ibiza
• Galería Margall, Oviedo
• Galería Nogal, Oviedo
• "... Y al principio fue la manzana". Feria de Muestras de Gijón
• Centro Asturiano de Madrid
• "Nuevos paisajes de Asturias", Madrid, Zamora, Teverga, Candás, Santillana del Mar, San Juan de la Arena, Avilés, Piedras Blancas, Oviedo, Muros de Nalón, Pola de Lena, Pravia, Mieres, Lisboa y Gijón
• Galería Durero, Gijón
• Galería Munuza, Gijón
• Feria de Colonia (Alemania)
• "Paisaje contemporáneo español". Hamburgo, Berlín, Bremen, Düsseldorf, Francfort, Hannover, Múnich, Stuttgart
• "Colección Lorenzana". Casa del Cordón, Burgos
• Galería Marta Llames, Oviedo
• Galería Vértice²³
• Caja de Asturias
• Pintores Asturianos nacidos en las décadas 40 y 50

CERTÁMENES Y CONCURSOS

• Certámenes juveniles, Oviedo
• 1964  IV Certamen Nacional de Arte Juvenil, Barcelona
• 1973  II Bienal de Pintura Gargallo, Gijón
• 1974  V Certamen Nacional de Pintura de Luarca
• 1976  I Bienal Nacional de Arte Ciudad de Oviedo
• 1979 II Bienal Nacional de Arte Ciudad de Oviedo
• 1981 Concurso del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Oviedo
• 1984 IV Bienal Nacional de Arte Ciudad de Oviedo
• 1987 Primer Certamen Nacional La Gastronomía en la Pintura. Restaurante Casa Consuelo, Otur (Luarca)
• 1992  VI Bienal Nacional de Arte Ciudad de Oviedo PREMIOS
• Certámenes de Arte Juvenil de Oviedo
• Primer Premio de Dibujo en el IV Certamen Nacional de Arte Juvenil de Barcelona
• Tercer Premio en la II Bienal de Pintura Gargallo de Gijón
• Mención Honorífica en el V Certamen Nacional de Pintura de Luarca
• Primer premio en el Concurso del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Oviedo

MUSEOS Y COLECCIONES

• Museo de Bellas Artes de Asturias
• Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Oviedo
• Ayuntamiento de Oviedo
• Caja de Ahorros de Asturias
• Fundación Lorenzana, Madrid
• Colecciones privadas en México, Madrid, Palma de Mallorca, Ámsterdam, Colonia, Oviedo y Gijón